jueves, 3 de noviembre de 2011
jueves, 20 de octubre de 2011
Nos vemos ahí!
A partir del viernes 14 de octubre, todos los viernes de octubre y noviembre, 19.30 h
Biblioteca Ricardo Güiraldes, Talcahuano 1261
Viernes 21 de octubre 19.30 h
Música: Fefe Botti & grupo. Lectura: Andrea Franco; Hernán Pueyrredon; Mariana Garfinkel
jueves, 1 de septiembre de 2011
martes, 19 de julio de 2011
miércoles, 13 de julio de 2011
Giannuzzi dice: Sueño del nadador
para corresponder
a los principios míticos del agua.
La coreografía empieza desde un punto
aéreo, elastizado,
donde el filo del trampolín revela
la soledad de una energía
concentrada en suspenso y en el cielo.
El conjunto se afina hasta crear
una mínima carne liberada
de carga emocional. Ahora solo basta
el pulmón feliz. Suelta su amarra
la tensionada fibra, se desprende, salta
y en rápida parábola
entra como un cuchillo en un reinado lento.
El agua vibra al sol como estrellada.
Convertida en mujer
con un baile en su seno se incorpora
una segunda alegría. El huésped cae
y largamente se demora abajo
como probando
la impune gracia de permanecer
para siempre en la azul profundidad,
palpando sus opciones
y sus posibles sueños venideros.
Pero aquí vuelve, sacudiendo un resto
de ensoñación goteada
a su estado mortal, con paso herido,
al triste error, vacilando
entre rígidos objetos aplastados
y su cuadrado peso.
martes, 3 de mayo de 2011
viernes, 1 de abril de 2011
Kapuscinski dice: Silencio
lunes, 21 de febrero de 2011
viernes, 11 de febrero de 2011
Antonin Artaud dice: Noche!
Los mostradores del cinc pasan por las cloacas, En los odres de las sábanas hinchadas El rostro obtuso de los techos Poeta, lo que te preocupa Mira como se llenan los vasos En alguna parte un poeta piensa. En cada aposento Un mazo de cartas flota en el aire En el ángulo oblicuo de los techos Porque aquí se cuestiona la Vida El Verbo brota del sueño El vaso y el vientre chocan: El areópago ardiente de los poetas La vida pasa por el pensamiento |
lunes, 7 de febrero de 2011
Fabián Casas dice: Una oportunidad!
Caminás con las manos en los bolsillos,
por la rambla, rodeando el mar.
Te acordás de otro tiempo, aquí mismo,
estabas enfermo de la cabeza
y no podías sostenerte de pie,
con elegancia. Sin embargo,
pudiste salir.
Hubo una oportunidad en aquella época.
Ahora mirás el mar, pero no decís nada.
Ya se han dicho muchas cosas
sobre ese montón de agua.